El Centro de Atención Integral Psicopedagógica Individual (Caipi) realizó la primera actividad internacional de solidaridad el pasado 26 de diciembre de 2020 en el asentamiento humano de la comunidad Villa de los Ángeles, ubicada en el distrito de Supe, Lima, Perú.
La actividad de solidaridad contó con una chocolatada navideña, así como la donación de ropa en buen estado, juguetes, dulces, cotillones, chocolate, panetton y tamales.
La chocolatada navideña benefició a 200 personas peruanas, es decir, 130 niños y 70 adultos, quienes la mayoría de las personas adultas fueron mujeres y madres de familia. Las familias de la comunidad no cuentan con ingresos económicos fijos y dependen del día a día para el sustento alimenticio.
La comunidad Villa de los Ángeles es una zona de bajos recursos con casas de barro y estera, sin buenas condiciones de los servicios públicos básicos para la existencia de cada ser humano y su desarrollo adecuado.
La actividad fue realizada como parte del propósito de Tibisay Betancourt Parra, directora de CAIPI y activista de derechos humanos de la Red de Activistas Ciudadanos por los Derechos Humanos (Redac), quien se encuentra en la ciudad de Lima, Perú, pero nunca ha dejado atrás el ayudar y apoyar a toda la humanidad, sin importar nacionalidades o colores.
Con ese objetivo, el Centro de Atención Psicopedagógico, junto al personal de trabajo, padres, familiares y amigos, brindaron solidaridad a la población vulnerable de la comunidad Villa de los Ángeles.
De igual forma, es importante resaltar que con iniciativas de Tibisay Betancourt Parra, CAIPI, Redac Barinas y diferentes actores importantes se han podido llevar a cabo las actividades de solidaridad constantemente desde hace 6 años, tanto fuera como dentro de Venezuela.
Betancourt Parra agradeció a todas las personas que han apoyado y apoyan cada actividad realizada, así como la contribución a la misma para la población vulnerable en Venezuela, especialmente en Barinas y en otros espacios que también lo necesiten.
En estos momentos, Venezuela atraviesa una situación muy difícil que empuja a todos los ciudadanos a ser empáticos con las otras personas y brindar una mano amiga, así como a sumarse a quienes desarrollan y aportan en estos gestos de solidaridad.
Las acciones permiten reconocer que otras personas tienen necesidades, viven con grandes situaciones de precariedad y quien puede apoyar y/o hacerlo, solo debe tener el interés y la voluntad para apoyar a toda la población que así lo requiera.
En este 2021, desde Caipi desean seguir con la labor de contribuir con las personas y regalar grandes momentos a quienes más necesiten.