Estamos en el noveno mes del año, un mes esperanzador y de paz, mes de inserción social, ciudadana, participativa y de igualdad para toda la población venezolana.
Este año 2020, ha sido complicado en todos los ámbitos, ¿que quiere decir eso? en lo social, en lo político, en la economía, en los valores, en las profesiones de diferentes ramas. La llegada del Covid-19 ha sido un trago amargo para los ciudadanos, pero sin embargo, muchas organizaciones, defensores, activistas, siguen en la tarea de educar, emprender, fomentar a las nuevas generaciones que deseen entrar al mundo de los DERECHOS HUMANOS, que es un derecho que jamás se debe renunciar, un derecho fundamental para todos, desde que nacemos hasta que morimos, un derecho que jamás debe ser violado por ningún organismo social, político y entes gubernamentales.
Pero cuando se habla de PAZ, a qué nos referimos? Sé que todos se preguntan, cómo podemos tener paz en este caos que vivimos hoy, si estamos cada vez peor que los anteriores, si la luz, el agua, el internet, el trabajo, la comida, el sueldo, la salud, las medicinas, la situación política, el gas, la preocupación y lo que sucede en el mundo entero, en fin, en todos los ámbitos que se nos pasen por la mente.
Pero en sí, ¿se han detenido a preguntarse y reflexionar sobre qué es la PAZ? Probablemente no. La P-A-Z, es una palabra, contiene tres letras, es algo fuerte y suave. Pero es más que letras, es algo que hace fuerza en nuestra mente, a nuestro alrededor, que impacta en quienes nos rodean, en fin, en diferentes aspectos de la vida.
La paz, según la página web Wikipedia.org: Paz (del latín pax), definida en sentido positivo, es un estado a nivel social o personal, en el cual se encuentran en equilibrio y estabilidad las partes de una unidad. También se refiere a la tranquilidad mental de una persona o sociedad; definida en sentido negativo, es la ausencia de inquietud, violencia o guerra”.
¿Cómo podemos tener paz, si estamos en un caos? Es cierto, estamos es un caos que nadie puede controlar, pero es importante trabajar en nuestro equilibrio interior y mental. No existe fórmula mágica, ni pastillita que nos generen esa paz, sino el trabajar en función a los que de verdad nos hace sentir bien con nosotros mismos y así la encontraremos. Un vivo ejemplo está los activistas de DDHH: trabajando, educando y creando nuevas herramientas para la población venezolana.
Como dice Benjamin Franklin: “O caminamos todos juntos hacia la paz, o nunca la encontraremos”. Debemos construir un mundo sin conflictos, un mundo que nos llene de satisfacción, de admiración, sobre todo de resiliencia. Pero, lo primero es trabajar en nuestra paz mental y en nuestro equilibrio interior, para poder transmitir esa paz a otro, inculcar, fomentar e incentivar ese sentimiento.
Para concluir, la paz es el motor que mueve el mundo entero, pero para accionarlo, debemos pensar en nosotros mismos, en vivir el presente, tomar la cosas con calma, ser felices con lo que hacemos. Siéntete satisfecho, busca el perdón, suelta la pena, aprecia cada detalle que te ofrece la vida.
Imagen cortesía de radionacional.co