Rubén Quintero, miembro fundador de Cadef.
El cierre de Radio Caracas Televisión (RCTV), en mayo de 2007, por órdenes del gobierno de Hugo Chávez, marcó a gran cantidad de venezolanos de todas las edades, el legendario canal con más de 50 años al aire dejaba de llegar a millones de hogares que se informaban y entretenían día a día con su programación. Cuando ocurrió ese ataque contra la libertad de expresión Rubén Quintero era apenas un adolescente de 12 años, aun así comprendió las dimensiones de ese hecho y cómo las decisiones gubernamentales podían afectar a la población.
Fue el punto a partir del cual surgió su interés por los derechos humanos, ese momento definió su futuro cercano. Hoy, a sus 23 años de edad, es abogado de la Universidad José Antonio Páez, del estado Carabobo, y forma parte del Centro de Acción y Defensa por los DDHH (Cadef), organización de la cual es miembro fundador y su director ejecutivo.
“Soy activista por la coyuntura que estamos viviendo. Con la intensificación de la situación en el país creció mi sensibilidad, a medida que veo todas las injusticias que se dan. El activismo es el lugar donde me siento cómodo para luchar por los derechos humanos desde la misma sociedad civil”.
El trabajo de Cadef se enfoca en los derechos que afectan a los jóvenes, explica Quintero. “El tema de los derechos civiles y políticos es bastante recurrente en nuestra labor, pero también tenemos mucho que hacer en seguridad ciudadana, pues los jóvenes son los que más padecen la inseguridad. A su vez nos hemos dado a la tarea de trabajar en el tema de la salud, sobre todo porque en Carabobo, donde está Cadef, los centros asistenciales están en condiciones paupérrimas, da dolor ver cómo las personas que acuden allí no encuentran los equipos ni los insumos para recibir atención. Por otra parte, la privación de libertades económicas que influyen tanto en los jóvenes que se ven en la obligación de migrar es también un tema atendido por nosotros”.
El aspecto formativo para jóvenes que tienen interés de capacitarse como activistas y defensores también es medular en Cadef. A ellos les ofrecen conversatorios de temas de derechos humanos, les enseñan cómo monitorear y documentar los diferentes tipos de violaciones, y dan talleres en temas específicos como la diáspora venezolana y seguridad ciudadana.
El vínculo con Redac se dio de manera natural, pues uno de los fundadores de la red forma parte de Cadef. “La alianza en redes es indispensable porque así el trabajo conseguirá los objetivos con más fuerza; si nosotros alcanzamos la defensa por los derechos humanos y promovemos a la juventud venezolana para que sea el sujeto llamado a impulsar ese cambio que requiere nuestro país y a su vez que sea la generación de relevo de quienes dirigen el activismo por los derechos humanos, podríamos formar un número muy bueno de jóvenes activistas y replicar esas experiencias en todo el país para alcanzar espacios que tal vez jamás imaginamos. Pero eso solo se puede lograr trabajando en redes, apoyándose. Incluso hasta por los acosos hacia la labor de los activistas, el trabajo en redes ofrece más seguridad, pues nos vamos a acompañar y a cuidar mutuamente”.
La llegada de Rubén Quintero al activismo se dio en momentos críticos para el movimiento de DDHH en el país, su juventud no le impide verlo, pero tampoco desistir: “Pese a las dificultades este trabajo debe perdurar y ser dinámico, pues mi generación ha aprendido por las malas dar la lucha social, defender la democracia y los derechos como ciudadanos, tenemos que sacar la apatía de nosotros, no podemos volver a tener una sociedad apática. El movimiento de derechos humanos es más que una obra benéfica”.