Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Algo para contar

En octubre de 2012,  luego de las elecciones presidenciales en las que se enfrentaron Hugo Chávez  y Enrique Capriles, algunos venezolanos se encontraban sumidos en la desmotivación y la desesperanza, y otros estaban en la búsqueda de espacios para seguir la lucha por la verdadera democracia.
Frente a este contexto, Cepaz comenzó a formar a los ciudadanos en talleres sobre derechos humanos, resaltando la importancia de que todos los conozcamos y los exijamos.

En el primer semestre de 2014, hubo protestas en las calles y se volvieron frecuentes y cada vez más graves las violaciones a los derechos humanos.

El país estaba frente a un proceso de criminalización de los ciudadanos por el ejercicio de sus derechos, que buscaba generar mayor miedo, intimidación, desmovilización y desesperanza.

Ante esta situación, Cepaz buscó la vía para lograr el despertar de los ciudadanos. Promover que las víctimas se activaran para exigir sus derechos.

Se comenzaron a dictar talleres. Ya para el mes de agosto de 2014 se realizaron 19 talleres, en 9 estados y se formó a 410 defensores en derechos humanos.

¿Qué es el activismo ciudadano?

El activismo surgió en respuesta de la necesidad de movilizarse y actuar para realizar un cambio. Se trata de una reacción ante algo que motiva lo suficiente como para dedicarle tiempo y esfuerzo, incluso riesgo personal, con el objetivo de lograr mejorarla.

En este sentido, supone definir un determinado objetivo que lograr, así como la organización y planificación necesaria para alcanzarlo.

Puede ser simplemente visibilizar una situación o un descontento, como también transformar la realidad de manera directa e inmediata.

Acciones para transformar o visibilizar realidades:

Si tenemos derechos, quiere decir que también tenemos responsabilidades para defender. Un ciudadano activo es aquel que cumple con sus derechos y responsabilidades de una manera equilibrada.

La defensa de los derechos humanos pasa por las 3 D: documentar, denunciar y difundir.

Esta defensa puede hacerse de manera individual, como ciudadano activo, o de modo colectivo, en redes, como por ejemplo la Red de Activistas Ciudadanos por los Derechos Humanos (Redac).

Estas acciones están vinculadas con la defensa de las libertades públicas y los valores de la democracia en el marco del Estado de derecho, como una vía para la construcción de la paz.

La paz se construye con actos cotidianos, y mientras más claro esté el objetivo más movilización se produce.

¿Por qué en red?

Cepaz busca canalizar y catalizar un importante cambio social, a través de la organización en redes de trabajo por los derechos humanos.

Las redes para el activismo inciden de manera directa en la responsabilidad que tienen las personas en la toma de sus decisiones cotidianas. Les ayuda a hacer mejores elecciones por sí mismo y fomentan el empoderamiento de los ciudadanos.

La red es una plataforma de acción que constituye una vía rápida, horizontal, sin estructuras preconcebida y efectiva para democratizar la defensa de los derechos humanos a través de la participación ciudadana.

La red es vista como un mecanismo, no como un fin. Permite:

– Mayor conciencia y acción.

– Fomenta el trabajo en estrecha relación con otros.

– Mantiene la acción.

– Cambia formas de pensar y la visión del mundo.

– Permite que las personas pasen de espectador a participante.

– Se logra incidir en los procesos de tomas de decisiones.

De esta manera muchos esfuerzos individuales, se potencian y combinan rápidamente en una poderosa fuerza colectiva.